Un delicioso aroma me lleva de nuevo hasta ti, es un aroma que viene del otro lado del Atlántico y me trae recuerdos llenos de experiencias y alegrías.
Estamos tan cerca pero sin embargo tan lejos. Es una distancia que se puede recortar en dos segundos, porque un nuevo contacto me hacer sentir que no hemos dejado de hablar nunca. En unos momentos, todos los meses pasados se concentran en un sinfín de palabras, intentamos ponernos al día de todo lo vivido, y me siento a gusto, hay personas con las que conectas y la distancia no importa.
Ese último café que tomamos, fue rápido, una visita fugaz, pero reconfortante, de las que te ponen de nuevo las pilas, porque tú sabes sacar de mi una persona alegre que me hace sentir feliz, estás llena de vida y eso se lo transmites a los demás.
Hay circunstacias en la vida que te alejan de personas con las que te gustaría vivir tu día a día, pero quizá esto hace que esa amistad sea más fuerte porque supera la barrera de las distancias.
Hay varías personas así en mi vida, pocas, creo que es lo importante, pocos pero buenos amigos. Ellos saben los que son, porque sé que sienten lo mismo que yo. Amigos con los que disfrutas de cosas sencillas como una cerveza en una terraza, un café o una simple charla en cualquier sitio.
Con algunos tengo más contacto, con otros la cosa es más complicada, y en mi corazón hay personas que no he vuelto a ver en años, pero que han sido importantes en mi vida, se que nos volveremos a ver y en ese momento nos sentiremos como si nos hubiesemos visto ayer.